La seguridad aérea es de interés público y afecta a toda la sociedad (Javier Aguado del Moral)


In times of universal deceit, telling the truth becomes a revolutionary act (George Orwell)


Cuando el sabio señala la luna, el necio se queda mirando el dedo (Confucio)

martes, 21 de abril de 2009

Y LUEGO DIRÁN QUE NO SABÍAN NADA

Hay una frase que sintetiza con acierto el reiterativo proceder de las autoridades públicas, medios de comunicación, y demás poderes ante las desgracias: A toro pasado todos somos Manolete.

El ser humano tiene una admirable capacidad para explicar por qué suceden las cosas… cuando ya han sucedido. Algunos lo llamarán ventaja evolutiva para la adaptación al medio, porque permite aprender de los errores y no cometerlos en el futuro. Esto tiene sentido, pero quizá sea aplicable a otras especies, porque es una realidad que "el hombre es el único animal que tropieza dos veces (y las que haga falta) en la misma piedra." Otros piensan que las cosas sólo les suceden a los demás, y entonces me viene a la cabeza la frase que me decía y todavía me repite mi madre "nadie aprende en cabeza ajena."

También es prodigiosa la capacidad para buscar y encontrar responsables de las desgracias que acontecen… y la culpa siempre es de las autoridades, que no tomaron las medidas necesarias para prevenir lo evitable. Gabriel García Marquez nos regaló la Crónica de una Muerte Anunciada, y la vida misma nos golpea un día sí y otro también con la Crónica de una Desgracia Anunciada y por lo tanto Evitable.

Y lamentable es la capacidad para olvidar pasado un tiempo. Nuevamente algunos lo llamarán ventaja evolutiva para la adaptación al medio, porque permite limpiar la mente de la pesada carga que suponen los recuerdos de las malas experiencias. Quizá bueno en el plano individual, pero catastrófico en el plano colectivo. Ya se sabe, el pueblo que olvida su historia está condenado a repetirla.

Fue Pierre Simon de Laplace, matemático, físico y astrónomo francés, el que dijo: ""En el fondo, la teoría de las probabilidades es sólo sentido común expresado en números." La teoría de la probabilidad y la estadística son poderosas herramientas que permiten, entre otras cosas "predecir el futuro" a partir de la experiencia pasada. Con el desarrollo de los análisis de fiabilidad y los análisis probabilísticos de riesgos, parecía que la ingeniería resolvería de una vez, en teoría, muchos problemas y, por ejemplo, en las centrales nucleares no habría accidentes catastróficos y los aviones no se caerían en pleno vuelo. Pero claro, también está la teoría del caos, siempre viene algún idiota, toca lo que no tenía que tocar y lo fastidia todo. Pasó, por ejemplo, en Chernobyl, y podría pasar, por ejemplo en el Aeropuerto de Madrid-Barajas. Ha pasado recientemente en Italia, y podría pasar, en el Aeropuerto de Madrid-Barajas. Ha pasado ya en el Aeropuerto de Madrid-Barajas, y puede pasar otra vez.

Resulta que un informe elaborado en 1999 advertía de lo mal preparados que estaban los edificios que resultaron dañados por el terremoto del pasado 6 de abril en la región de Los Abruzos. Los medios italianos hablan del dossier olvidado y de que ya estaba todo previsto desde 1999, al referirse a este documento que enumera todos los inmuebles que no estaban preparados para afrontar un movimiento sísmico y que son aquellos que cedieron tras el temblor de la semana pasada.

Bajo el título de "Censo de vulnerabilidad de los edificios públicos, estratégicos y especiales en las regiones de Los Abruzos, Basilicata, Calabria, Campania, Molise, Apulia y Sicilia" el informe fijaba una clasificación de 42.106 edificios. Se consideraba zona de riesgo todo el centro histórico de esta localidad, una de las más afectadas por el terremoto, y de los edificios considerados de gran vulnerabilidad 171 eran centros educativos y otros 55 albergaban instalaciones hospitalarias. Peor aún, ahora se sabe que el Ayuntamiento de L'Aquila pidió ayuda en un telegrama enviado, entre otros, al departamento de Protección Civil del Gobierno italiano cinco días antes de que se produjera el seísmo del pasado 6 de abril que se ha cobrado 295 vidas. Y claro La fiscalía de Italia ha anunciado que arrestará a los constructores que hayan levantado edificios en la zona afectada por el terremoto sin respetar la legislación antisísmica.
Se sabía, se pudo haber evitado, pero al final: lo de siempre. En el Aeropuerto de Madrid-Barajas: lo sabemos, lo avisamos, lo denunciamos, ya hay un accidente, y sin embargo: todo continúa igual. Luego dirán que había informes que alertaban del riesgo y que no se hizo nada y entonces culparán a la administración. Pero no, la culpa será de todos, y no sólo de AENA y la Dirección General de Aviación Civil.
Y ahora nos enteramos que el juez del accidente de Barajas recusa a los pilotos… porque son afiliados del SEPLA (podemos leer la noticia del 17 de abril en Aviación Digital).
También recomendamos el magnífico artículo publicado en Aviación Digital sobre lo sucedido con el Comandante de Iberia Miguel Ángel Gordillo: En 2006 fue despedido de la compañía por negarse a aceptar un avión que a su juicio no se encontraba en condiciones de volar. Gordillo ha ganado dos juicios, pero en ambos el resultado ha sido que su despido ha sido declarado improcedente.



Desde Las mentiras de Barajas le expresamos toda nuestra solidaridad y la hacemos extensiva a aquellos profesionales que actúan con determinación, sentido común y conforme a las leyes. Ni a ellos ni a nosotros nos callarán.